Declaración conjunta de las ONG sobre los incendios en los campamentos rohingya de Cox’s Bazar

marzo 25, 2021

Nos solidarizamos con las 10.000 familias de refugiados rohingya afectadas por los graves incendios en el campamento de Kutapalong, en Cox's Bazar, Bangladesh. Las organizaciones de ayuda humanitaria y el Gobierno de Bangladesh están trabajando incansablemente y de forma conjunta para apoyar a los afectados por el incendio del 22 de marzo de 2021.

El incendio causó estragos en los campos de refugiados, densamente poblados, y se extendió rápidamente por cuatro de los campamentos que integran el mayor asentamiento de refugiados del mundo, que alberga a más de un millón de personas.
 

Seguimos trabajando sin descanso

Desde el primer momento, personas voluntarias rohingya acudieron al lugar de los hechos para responder a la emergencia y siguen trabajando sin descanso para ayudar a contener el fuego y salvar vidas, en estrecha colaboración con los cuerpos de bomberos, los miembros de la comunidad humanitaria y los y las residentes locales.

A pesar de estos esfuerzos, los primeros informes de los campamentos indican que al menos 11 personas han fallecido en este trágico suceso. Con los refugios reducidos a cenizas y sin ningún lugar donde vivir, las mujeres, las niñas, las personas con discapacidad y las personas mayores son quienes se enfrentan a mayores peligros que amenazan su seguridad personal.
 

Las dificultades que provoca la valla que rodea los campamentos

Nos preocupan especialmente los relatos que nos han hecho llegar las personas refugiadas rohingya, que nos han contado que estaban atrapadas y no podían ponerse a salvo debido a la valla que ahora rodea los campamentos. En algunos casos, tuvieron que cortar la valla de alambre de espino para sobrevivir. 

El vallado dificulta la posibilidad de las y los refugiados para escapar y ha causado importantes retrasos a los servicios de bomberos. Huir en estas circunstancias es aún más difícil, si no imposible, para las personas refugiadas con discapacidad.

Estos retrasos contribuyeron a que se produjeran mayores daños en las viviendas, los centros de aprendizaje y las instalaciones sanitarias, de los que dependen los refugiados, especialmente en uno de los campamentos, donde todo ha quedado reducido a cenizas. 
 

Es necesario tomar medidas urgentes

Agradecemos enormemente la colaboración del Gobierno de Bangladesh, el ejército, la policía y los bomberos, así como sus esfuerzos por extinguir el fuego y colaborar con el personal humanitario para asistir a las personas refugiadas afectadas. 

Sin embargo, es necesario aumentar los esfuerzos para garantizar que esta catástrofe no se repita en el futuro. Aunque el incendio de hace unos días es, con diferencia, el más grave ocurrido hasta el momento, no es el único de importancia que se ha producido en los últimos meses.

Por lo tanto, es necesario tomar medidas urgentes para garantizar la seguridad de las personas refugiadas, así como el acceso de la ayuda humanitaria de emergencia para evitar la pérdida de vidas y mitigar la exposición a riesgos extremos en el futuro.
 

Nuestras recomendaciones

Tras lo ocurrido el lunes, proponemos las siguientes medidas a considerar para llevarlas a cabo en coordinación con Naciones Unidas, las agencias donantes, el Gobierno de Bangladesh y los líderes comunitarios. Al trabajar conjuntamente, reafirmamos nuestro compromiso con la seguridad y el bienestar de las y los refugiados y las comunidades de acogida en Cox's Bazar. Nuestras recomendaciones son las siguientes:

- Tras el incendio, hay que intensificar la ayuda en alojamiento, alimentos, agua, salud, protección de la infancia y apoyo psicosocial a las personas refugiadas. La comunidad internacional debe garantizar que la respuesta tenga la financiación adecuada para cubrir unas necesidades que ahora son mayores que antes.
- Se debe replantear el sistema de vallas que atraviesan las carreteras de acceso a los campamentos, y abrir las puertas de acceso y dotarlas de personal las 24 horas del día, para garantizar el paso seguro durante las emergencias y el acceso de los servicios de respuesta a las mismas.
- Los campamentos deben ser seguros para las personas refugiadas en situaciones de emergencia. Los campamentos tienen que ser reconstruidos de forma más segura, proporcionando más espacio entre los refugios y utilizando materiales no inflamables. Deben trazarse mapas y carteles que marquen claramente las rutas seguras. Este plan debe elaborarse con las aportaciones de los y las refugiadas rohingya, las comunidades de acogida afectadas y el personal humanitario.
- Es necesario un plan de evacuación completo. Debe redactarse en colaboración con los agentes humanitarios pertinentes, para garantizar la seguridad de los y las rohingya en caso de que se produzcan inundaciones, incendios, ciclones u otras emergencias repentinas.
- Muchas personas refugiadas han perdido toda su documentación debido al incendio. El Gobierno de Bangladesh y la comunidad humanitaria deben garantizar que los y las refugiadas tengan un acceso continuo y sin obstáculos a los servicios hasta que puedan volver a disponer de la documentación pertinente.
 

Firmado:

ActionAid, Acción contra el Hambre, CARE, Christian Aid, Community Partners International, Concern Worldwide, DanChurchAid, Consejo Danés para los Refugiados, Educo, HEKS/EPER- Ayuda de la Iglesia Suiza, HELVETAS, Handicap International – Humanidad e Inclusión, Comité Internacional de Rescate, Islamic Relief, MAF Bangladesh, Médicos del Mundo Francia, Médicos del Mundo Japón, Médicos del Mundo Suiza, Consejo Noruego para los Refugiados, Oxfam Internacional, Plan International, Soluciones Prácticas, Save the Children, Solidaridad Internacional, United Purpose, World Vision, VSO.
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